Una de las razones por las cuales me encanta el iPhone. Y una de las razones, también (uf, mi prosa está como la del escritor fantasma de Piñera!), por las que mis hijos ya no me saludan con un “hola, papá!”, sino un “préstame tu iPhone”?… Así que mejor ni les muestro este post.
Cristián Ritalin León
コメント